Chihuahua: 12 años de ansiedad, desolación y dos “toque de queda”

CHIHUAHUA.- La vez anterior que se escuchó el rumor de que las autoridades aplicarían un “toque de queda” fue hace 12 años en noviembre del 2008 cuando se inició la crisis de violencia e inseguridad producto de la guerra entre los cárteles del narcotráfico (Juárez vs Sinaloa) durante los gobiernos estatal de José Reyes Baeza y federal de Felipe Calderón Hinojosa.

La incertidumbre en la que se vieron envueltos los sectores sociales, políticos y económicos de Chihuahua engendraron un panorama de desesperanza y pesimismo.

Las autoridades se veían rebasadas ante el nivel de violencia nunca antes observado en la entidad (cadáveres colgados en las puentes y pasos peatonales, ejecuciones en calles y avenidas, asesinatos de elementos policiacos, narcomantas con amenazas en contra de jefes policiacos y políticos, etc).

A mediados de noviembre del 2008 la oposición encabezada por los entonces diputados panistas Fernando Álvarez Monge y Miguel Jurado (con llanto en los ojos) exigían soluciones al entonces Secretario General de Gobierno, Sergio Granados, al que acusaban de burlarse de la situación pero que les respondía que combatir al crimen organizado era responsabilidad del gobierno federal.

 “ESTAMOS PERDIENDO EL RUMBO”: REYES BAEZA

Durante la inauguración de una nave industrial, el entonces gobernador José Reyes Baeza reconocía que la sociedad actual estaba convulsionada ya que “estamos perdiendo la esencia de los valores y principios que nos daban cohesión, identidad y rumbo”.

Por su parte el empresario y promotor industrial Luis Lara comentaba desconcertado que “no entendía porque esta situación de violencia tan desatada” que dificultaba atraer más inversiones.

ASESINATO DE MIGUEL ETZEL MALDONADO

Un año después, el 21 de octubre del 2009, otro acontecimiento que cimbró a la sociedad chihuahuense fue el asesinato del político priista Miguel Etzel Maldonado a las puertas de su casa, cuando no ejercía cargo público aunque se mencionaba para sustituir a Patricia González en la entonces Procuraduría de Justicia del Estado.

LOS VIDEOS DEL HERMANO DE PATRICIA GONZALEZ

Un año más tarde, a pesar de las elecciones donde resultó electo gobernador César Duarte Jáquez, los niveles de violencia no cedían en Chihuahua y de hecho eran el principal reclamo y promesa de campaña del nuevo mandatario, aunque al inicio de su sexenio en octubre del 2010, una nueva catarsis que sacudió a la sociedad chihuahuenses fue el secuestro de Mario Ángel González Rodríguez, hermano de la ex procuradora Patricia González, a quien sus captores obligaron a confesar con lujo de detalle una serie de crímenes y complicidades con el cártel de “La Línea” y cuyos videos fueron subidos a la red social youtube causando descomunal revuelo y especulación.

Pocas semanas después, el 16 de diciembre del 2010, el impune asesinato de Marisela Escobedo en las propias puertas del Palacio de Gobierno de Chihuahua ponía fin a esa triste primera década del tercer milenio plagada de sangre, desesperanza y desolación.

No sabíamos entonces que diez años más tarde, en este 2020, muchas cosas seguirían igual o peor: la prolongada violencia e inseguridad, un lamentable sexenio plagado de corrupción que “empujó” a los mexicanos a optar por un fallido cambio de régimen orientado hacia el socialismo, y para cerrar una crisis de salud global provocada por el virus covid-19, han hecho recordar (y experimentar con mayor agudeza), nuevamente esa sensación de ansiedad y desasosiego que los chihuahuenses tuvimos que soportar hace una década.